Si usted ha asistido a una iglesia, entonces es probable que haya escuchado que Dios le ama y tiene un plan para su vida. ¿Lo cree? Lamentablemente, algunas personas piensan que versículos como “Porque de tal manera amó Dios al mundo…” (Jn 3.16) no se aplican a ellas, al creer que son demasiado débiles, pecadoras o rotas para merecer el amor del Señor.
Dios le considera especial. Por su amor, envió a su Hijo a morir en la cruz por los pecados de todos, pasados, presentes y futuros. Ninguno de nosotros merece su cuidado, pero su amor no depende del merecimiento. De hecho, Él demostró su amor a través de la muerte de Cristo “siendo [nosotros] aún pecadores” (Ro 5.8; 1 Jn 4.8).
Dios ama tanto a sus hijos que les asigna un lugar único en su plan para el mundo. A cada seguidor le otorga las habilidades y atributos necesarios para cumplir con el propósito específico que tiene para ellos en su reino (1 Co 12.11).
El Señor le ama, y lo repite una y otra vez en la Biblia. Aunque pueda ser difícil aceptarlo, en especial si ha sido herido por otros, no permita que esas experiencias le alejen de las bendiciones que Él desea darle. Lea su Palabra y descubra cuánto se interesa por usted, el amado Hijo de Dios.
BIBLIA EN UN AÑO: ISAÍAS 31-35